Conmovido estoy de haber logrado saltos hacia mejorar mi compresión de lector, sumando el día de hoy 38 años en el periplo de esta vida, hago un recorrido por lo difícil que ha sido mejorar mi concentración y entendimiento en los libros que leo.
Fue en la preparatoria donde comencé a disfrutar la lectura de los libros, recuerdo que las páginas de "El Extranjero" de Camus me ilusionaron acerca del contenido que podrían reservarme otros libros.
En la universidad no pude avanzar mucho en mi apetito lector, a pesar de que conocía cómo llegar a la librería Gandhi, y no pude cultivarme como yo hubiera deseado. Mis estudios se enfocaban en la Ingeniería Química, aunque bien hubiera congeniado muchas lecturas que no realicé y que en mi formación me hubieran proporcionado inexpugnabilidad, una fortaleza mental que no fue posible lograr pero siempre poseía la ilusión oculta de volverme un mejor lector.
Cuando realizaba el servicio social en el museo móvil del Papalote, otra vez reinicié con mis lecturas, y adquirí "La Nausea" de Sartre, y otra vez me conmoví, debía de haber más libros que me impresionaran.
Ya trabajando, tuve un maravilloso tesoro, de aprovechar el tiempo libre en mi lugar de trabajo para dar lectura a muchos libros, recuerdo "El Corazón de las Tinieblas", "Crimen y Castigo", "La Vorágine", "Fouché, el genio tenebroso" de Zweig, desde luego "La Especie Humana" de Antelme, y otros más. Leía mucho, todos los días, era un verdadero paraíso si hubiera continuado trabajando en el mismo sitio. Mi nivel de lectura era básico, las obras me conmovían, a cada una se sumaba el gozo de la lectura anterior.
En mi primer curso de francés, mi maestra advirtió que mis lecturas no iban por el camino que buscaba para comprensión y entendimiento del mundo, ella me recomendó leer "Una Vida" de Maupassant, que leí también en la comodidad de mi trabajo espléndido. Añado que me sugirió leer lo que consiguiera de "La Comedia Humana". En este caso casi no pude avanzar, a pesar de que cada año iba a México a la Feria Internacional del Libro en el Palacio de Minería y me cruzaba con algunos de títulos de Balzac. Fue el año pasado cuando me asombro la magia de Balzac con las peripecias de Luciano de Rubempré en "Ilusiones Perdidas".
Recuerdo que en mi permanencia con mi maestra canadiense, casi no tuve la recomendación directa de libros, pero me entusiasmo verla con un ejemplar de "La Casa de los Espíritus" y he sido dichoso de asistir al taller literario en Coneculta de mi amigo Jorge Mancilla sobre Novela Hispanoamericana de Dictadores, recuerdo algunos títulos que leímos: "Tirano Banderas" de Valle Inclán, "La Sangre" de Cestero, "El Reino de Este Mundo" de Carpentier, "Maten al León" de Ibargüengoitia, "El Otoño del Patriarca" de García Márquez, "Yo, El Supremo" de Roa Bastoa, "La Fiesta del Chivo" de Vargas Llosa. Estoy feliz por ello, de haber dado lectura al libro pequeño de El Cartero de Skármeta, mi maestra canadiense me comparó en una bonita metáfora a que mi condición era la de ser un humilde cartero. Inspirado por el amor a los libros que me inspiró mi extraña maestra, leí "El lector" de Schlink, y en mi fantasía ha quedado marcada para siempre la energía de alguien que vive para leer (aunque sea propiamente leída) como es la personaje Hanna de la novela, quien es acusada por los crímenes nazis.
Recuerdo muy bien cómo sufrí el asalto de la paranoia cuando leía un libro de Fritz Glockner titulado "El Barco de la Ilusión" sobre la vida del cómico Tin Tan, a través de unos jóvenes que como escape se dan unos toques de mariguana. Ironía, yo sufrí alucinaciones con mi propia mente sin necesidad de estupefaciente alguno.
En el momento que la paranoia se transformó en esquizofrenia, traté de defenderme leyendo, y recuerdo todavía mis anotaciones sobre "La Montaña del Alma" de Gao Xingjian, lo consideraba una piedra filosofal que era mi deber escudriñar, las claves del universo se encontrarían allí.
Al quedarme sin trabajo por motivo de la esquizofrenia, ya recuperado tuve la intención de profundizar más en la lectura, aprecio el taller sobre Literatura Maldita en Coneculta del poeta René Morales, alguna vez disfruté "Historia del Ojo" de Bataille, y por primera vez comencé a enfrentarme a "Las Flores del Mal" de Baudelaire.
Recuerdo un taller adicional dirigido por Marco, gran amigo de Jorge Mancilla, donde me proporcionaron los pasos principales para realizar un escrito, fue cuando escribí mi única novela a la fecha "El Malestar Extraterrestre ¿Cómo Librarse del Monolito?"
Y así continúe luego con el taller de novela sobre dictadores en Coneculta, y luego con el de "Literatura Africana" por aniversario de la UNACH, donde memorablemente recuerdo la lectura de "El Callejón de los Milagros" del egipcio Mahfuz (el padre de mi maestra canadiense tuvo origen egipcio).
Mi vida lectora tuvo un importante desarrollo cuando me encontré en México auxiliando a mi padre que padeció un cáncer en el cuello, tuve la posibilidad de leer "Memorias de Cleopatra" de Margaret George, ya había leído un tiempo antes "Helena de Troya" también de Margaret George. Y así, leí "El Monje" de Lewis, y desde luego "Memorias de Adriano" de Yourcenar, comencé a leer "Auto de Fe" de Canetti, recomendación de mi amigo Jorge Mancilla.
Todavía con vida mi padre, asistí al III Coloquio Gótico Internacional cuyo tema era "Los Monstruos" y me divertí mucho tomando información de las ponencias, ya de regreso recuerdo la lectura de "Opus Nigrum" de Yourcenar, mi padre fallecería cuando realizaba la lectura de "El Reino de Este Mundo" del cubano Carpentier en el taller de novela sobre Dictadores en Coneculta (fuimos a La Habana, Cuba con mi padre para buscar tratamientos contra su cáncer)
Cuando me fue proporcionada una oportunidad de trabajo, tuve la posibilidad de seguir mejorando mi lectura, recuerdo en mi período estable, dejé escrito mi ensayo "La Oscuridad en El Hombre Invisible creado por Wells" que presenté en el IV Coloquio Gótico Internacional sobre el tema Tecnología. Y leí entonces "La Cartuja de Parma" de Stendhal, escritor que me gusta mucho y del cual leí en mis inicios "Rojo y Negro". Además tuve la posibilidad de leer "El Cisne Negro" de Nassim Nicholas Taleb, después de sufrir otro "cisne negro" de los que me han derrumbado, propiciado por la esquizofrenia, volví a leer mucho y avancé con "La Muerte de Montaigne" de Jorge Edwards, "La Amante Inglesa" de Marguerite Duras, "Cómo Vivir o Una Vida con Montaigne" de Sarah Bakewell, festejó haber leído "El Ser y la Nada" de Sartre, volví a leer "Jacques el Fatalista" de Diderot de quien me gusta también mucho "El Sobrino de Rameau", y así hasta quedarme sin trabajo nuevamente.
Recientemente, ahora que trabajo como maestro en una preparatoria, he podido leer "Lo Sagrado en el Pensamiento de María Zambrano", me entusiasmé con la lectura de "Demonios" y "Los Hermanos Karamazov" de Dostoievski, releí "El Cartero" de Skármeta y "El Lector" de Schlink, y he gozado lo que hasta ahora he leído de "La Montaña del Alma" de Gao Xingjian. En este período tuve oportunidad de releer "La Pianista" de Jelinek, y estuve tentado a regalar a una profesora de inglés mexicana el libro de "Dante in Love" que compré en la librería Bookshelf de mis amigas Eliza y Paola, donde también adquirí "El Libro de la Mujer Fatal" editado por Marta Sanz, "Ella, Drácula" de Javier García Sánchez, lo que me recuerda mi buena época cuando conseguí mis primeros acercamientos con "Vamps" de Pam Keesey o "Femme Fatale" de Virginia M. Allen, y desde luego "Las Diabólicas" de Barbey D'Aurevilly, de quien tuve oportunidad de leer "L'Ensorcelée (La Hechizada)", y me encanta el "Moby Dick" de Melville y disfruté también mucho "El Gran Gatsby" que me recomendó mi amiga Daria, y tengo muchos pendientes, y aunque el peso de la carestía todavía lo tengo encima aspiro a ser un mejor lector, me defrauda no poder leer "Ulises" de Joyce, me quedó en el quinto o sexto capítulo cada vez que lo intento, no puedo lograr la lectura tampoco de "Gramatología" de Derrida o "Lógica del Destino" de Deleuze, y también queda para mejores tiempos "Shakespeare: La Invención de lo Humano" de Harold Bloom, por ahora me complace haber dado lectura al libro facilitado por una persona muy inteligente, buen amigo de este pequeño lector, que se titulaba "¿Existe la Suerte?" de Nassim Nicholas Taleb: Quiero creer que tendré una racha de buena suerte y podría aspirar a ser mejor lector. Por lo pronto, me ha costado erigirme en el lector que soy hasta el día de hoy, aprecio más el poder los libros, quisiera sacarme la lotería y dedicarme a explorar más libros, por lo pronto, me dedicó a mi libro personal que es aburrido porque aparentemente todo es cotidiano, no pasa nada relevante, en fin, apostar es la regla de oro, ya veremos como en "El Jugador" de Dostoievski si ganamos el Todo o la Nada.
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lunes, 27 de enero de 2014
sábado, 25 de enero de 2014
jueves, 23 de enero de 2014
martes, 21 de enero de 2014
TIGRE BLANCO
Hoy me percaté que mañana hace exactamente diez años que recibí el mensaje de la Dama Inglesa; como casualmente leo "La Montaña del Alma" de Gao Xingjian, subo el fragmento que me ha asombrado hace unos minutos:
'Ella dice unas imprecaciones incomprensibles, algo así como: "Reina Madre de Occidente, Señores del Cielo y de la Tierra, un pino en la casa de los espíritus ha hollado las ruedas terrestres y celestiales mientras que los demonios y los monstruos han quebrantado todos los tabúes". Habla cada vez más rápido. Ha de tener por fuerza un entrenamiento especial. Estoy convencido de que ahora ya está preparada. La anciana se acerca a su oído y me anuncia con cara sombría:
-¡No le sonríe la fortuna a usted, ándese con cuidado!
La médium sigue murmurando, sus palabras se han vuelto totalmente ininteligibles.
-¡Dice que se ha encontrado usted con la Estrella del Tigre Blanco! -me explica la anciana.
Sé que el Tigre Blanco designa a la mujer extremadamente atractiva de la que es dificilísimo escapar si uno cae en sus redes. En realidad, deseo ardientemente caer en sus redes, pero también quiero saber si puedo escapar a mi infortunio.
-No -dice la anciana sacudiendo la cabeza-, le va a costar mucho.
Es evidente que no soy un hombre con suerte: nunca he sido, por otra parte, persona afortunada. Lo que deseo no se realiza jamás, mientras que lo que temo se cumple siempre. En el curso de mi vida, las catástrofes han sucedido a las catástrofes y nunca he dejado de tener problemas con las mujeres, pero las amenazas que he sufrido no han venido necesariamente de ellas. En realidad, nunca he tenido un conflicto muy serio con nadie, no sé a quién he podido causar daño y lo único que deseo es que nadie me lo cause a mí.'
Cuando tuve el primer período de esquizofrenia me refugié en la lectura de "La Montaña del Alma" de Gao Xingjian, no puedo decir que realicé una apropiada lectura, pero tomaba notas que condujeron a la creación del siguiente post en Stay, Spider:
Esquizofrenia en LINGSHAN de GAO XINGJIAN
'Ella dice unas imprecaciones incomprensibles, algo así como: "Reina Madre de Occidente, Señores del Cielo y de la Tierra, un pino en la casa de los espíritus ha hollado las ruedas terrestres y celestiales mientras que los demonios y los monstruos han quebrantado todos los tabúes". Habla cada vez más rápido. Ha de tener por fuerza un entrenamiento especial. Estoy convencido de que ahora ya está preparada. La anciana se acerca a su oído y me anuncia con cara sombría:
-¡No le sonríe la fortuna a usted, ándese con cuidado!
La médium sigue murmurando, sus palabras se han vuelto totalmente ininteligibles.
-¡Dice que se ha encontrado usted con la Estrella del Tigre Blanco! -me explica la anciana.
Sé que el Tigre Blanco designa a la mujer extremadamente atractiva de la que es dificilísimo escapar si uno cae en sus redes. En realidad, deseo ardientemente caer en sus redes, pero también quiero saber si puedo escapar a mi infortunio.
-No -dice la anciana sacudiendo la cabeza-, le va a costar mucho.
Es evidente que no soy un hombre con suerte: nunca he sido, por otra parte, persona afortunada. Lo que deseo no se realiza jamás, mientras que lo que temo se cumple siempre. En el curso de mi vida, las catástrofes han sucedido a las catástrofes y nunca he dejado de tener problemas con las mujeres, pero las amenazas que he sufrido no han venido necesariamente de ellas. En realidad, nunca he tenido un conflicto muy serio con nadie, no sé a quién he podido causar daño y lo único que deseo es que nadie me lo cause a mí.'
Cuando tuve el primer período de esquizofrenia me refugié en la lectura de "La Montaña del Alma" de Gao Xingjian, no puedo decir que realicé una apropiada lectura, pero tomaba notas que condujeron a la creación del siguiente post en Stay, Spider:
Esquizofrenia en LINGSHAN de GAO XINGJIAN
lunes, 13 de enero de 2014
martes, 7 de enero de 2014
EL COMFORT
Iniciamos el proceso de escritura desde esta posición compleja que significa no tener comfort, pero en algo fructificará ya que el aprendizaje que se va consolidando es un síntoma de que la experiencia no ha sido en vano.
Estoy convencido de que una vida sin comfort es un castigo, creo que las futuras generaciones no deberían padecer la preocupación por sentirse limitados en cuanto a sus deseos, pero es bien sabido que esta vida tiene contratiempos, y que no es un paseo donde siempre todo va a salir de acuerdo a lo planeado.
En mi óptica, creo que ha sido invaluable la oportunidad de gozar la placentera dicha de no preocuparse por el mañana y disfrutar como un tesoro los momentos bellos que me han tocado vivir.
Pero, al eludir la carga o trabajo, se llega a un punto en que eres apremiado por los factores externos que te buscan forzar para que seas un engranaje más de la maquinaria productiva.
¿Qué sería una persona si no satisface sus deseos? Creo que sería inútil o algo sin interés, pero he ahí que la presión del sistema productivo aniquila la posibilidad del crecimiento del ser. Me refiero a que cumplir con el esquema tradicional de trabajar para sostener una familia se vuelve una carga insoportable para liberar la mente y ir cosechando logros en la conquista del ser. Soy pesimista a que una sociedad sin la variante de desarrollar las energías creativas de su población está condenada a ser sometida por los designios de las llamadas sociedades felices.
Mi apuesta al escribir sobre el comfort radica en lo que a mi parecer es un punto crítico del posterior desarrollo de una persona. Desde luego, la dureza luterana de vivir por y para el trabajo como una forma de purificar el alma humana, provoca una situación de encarcelamiento que deja vacía el alma humana, la posterior redención de obtener los frutos del trabajo son como el bálsamo para curar las heridas, se sufre y luego se busca lo que nos evitará el sufrimiento, como puede ser dormir demasiado. El problema del trabajo excesivo radica en que el alma se enajena y el trabajador se vuelve un autómata que hasta se siente a disgusto cuando no trabaja.
El comfort en una vida puede provocar la desagradable experiencia de perder la situación de comodidad. Hablemos de que el libertinaje necesita de medios para sostenerse, la ociosidad necesita que sea fomentada, no se puede hallar la bendición de un paraíso, cuando no existe, por desgracia, el sueño se rompe y el humano libre se ve encadenado por haber olvidado que habría que desempeñar un trabajo para sostener una vida disipada.
Se condenara acaso el atrevimiento de tomar la vida como asistir a un parque de diversiones, uno se siente transportado a disfrutar de todos los juegos, y acaso no está mal, ¿qué sentido tienen la creación de los juegos cuando no te atreves a utilizarlos? Y no se trata del argumento oligárquico de que los juegos son para engañar a los bobos, se trata más bien de que somos depositados como seres que desconocen lo que les rodea, y que en sus intentos personales buscan la receta o el secreto que se oculta en cada una de las pruebas que la vida nos depara.
El factor de crecimiento se encuentra en discernir lo que nos conviene para fortalecer nuestra alma, o en aventarse a cruzar lo que nos resulta desconocido, ya que si podemos quedar como el Edipo, ciegos ante la idea de que habíamos logrado algo y el secreto es que nunca conseguimos nada. Creo que hay una maduración al constatar que ya no somos los mismos, sino que simplemente hemos avanzado hacia estados que nos preparan la entrada a nuevas aventuras, a pesar de no tener el comfort el alma estará inquieta hasta lograr dar el salto sobre lo establecido. No teniendo el parque de diversiones a la mano, se inventarán estrategias para romper el cerco, ya que no hay una segunda vida, cabe en lo posible usar lo poco que se tiene para ganar lo mucho que se puede. El comfort será resistir y no dejarse caer para vencer el obstáculo de conseguir una vida plena...
Estoy convencido de que una vida sin comfort es un castigo, creo que las futuras generaciones no deberían padecer la preocupación por sentirse limitados en cuanto a sus deseos, pero es bien sabido que esta vida tiene contratiempos, y que no es un paseo donde siempre todo va a salir de acuerdo a lo planeado.
En mi óptica, creo que ha sido invaluable la oportunidad de gozar la placentera dicha de no preocuparse por el mañana y disfrutar como un tesoro los momentos bellos que me han tocado vivir.
Pero, al eludir la carga o trabajo, se llega a un punto en que eres apremiado por los factores externos que te buscan forzar para que seas un engranaje más de la maquinaria productiva.
¿Qué sería una persona si no satisface sus deseos? Creo que sería inútil o algo sin interés, pero he ahí que la presión del sistema productivo aniquila la posibilidad del crecimiento del ser. Me refiero a que cumplir con el esquema tradicional de trabajar para sostener una familia se vuelve una carga insoportable para liberar la mente y ir cosechando logros en la conquista del ser. Soy pesimista a que una sociedad sin la variante de desarrollar las energías creativas de su población está condenada a ser sometida por los designios de las llamadas sociedades felices.
Mi apuesta al escribir sobre el comfort radica en lo que a mi parecer es un punto crítico del posterior desarrollo de una persona. Desde luego, la dureza luterana de vivir por y para el trabajo como una forma de purificar el alma humana, provoca una situación de encarcelamiento que deja vacía el alma humana, la posterior redención de obtener los frutos del trabajo son como el bálsamo para curar las heridas, se sufre y luego se busca lo que nos evitará el sufrimiento, como puede ser dormir demasiado. El problema del trabajo excesivo radica en que el alma se enajena y el trabajador se vuelve un autómata que hasta se siente a disgusto cuando no trabaja.
El comfort en una vida puede provocar la desagradable experiencia de perder la situación de comodidad. Hablemos de que el libertinaje necesita de medios para sostenerse, la ociosidad necesita que sea fomentada, no se puede hallar la bendición de un paraíso, cuando no existe, por desgracia, el sueño se rompe y el humano libre se ve encadenado por haber olvidado que habría que desempeñar un trabajo para sostener una vida disipada.
Se condenara acaso el atrevimiento de tomar la vida como asistir a un parque de diversiones, uno se siente transportado a disfrutar de todos los juegos, y acaso no está mal, ¿qué sentido tienen la creación de los juegos cuando no te atreves a utilizarlos? Y no se trata del argumento oligárquico de que los juegos son para engañar a los bobos, se trata más bien de que somos depositados como seres que desconocen lo que les rodea, y que en sus intentos personales buscan la receta o el secreto que se oculta en cada una de las pruebas que la vida nos depara.
El factor de crecimiento se encuentra en discernir lo que nos conviene para fortalecer nuestra alma, o en aventarse a cruzar lo que nos resulta desconocido, ya que si podemos quedar como el Edipo, ciegos ante la idea de que habíamos logrado algo y el secreto es que nunca conseguimos nada. Creo que hay una maduración al constatar que ya no somos los mismos, sino que simplemente hemos avanzado hacia estados que nos preparan la entrada a nuevas aventuras, a pesar de no tener el comfort el alma estará inquieta hasta lograr dar el salto sobre lo establecido. No teniendo el parque de diversiones a la mano, se inventarán estrategias para romper el cerco, ya que no hay una segunda vida, cabe en lo posible usar lo poco que se tiene para ganar lo mucho que se puede. El comfort será resistir y no dejarse caer para vencer el obstáculo de conseguir una vida plena...
viernes, 3 de enero de 2014
ALENTADOR VIAJE POR LA SENDA ÓRFICO-PITAGÓRICA
¡Qué aventura ha resultado la lectura del ideario de María Zambrano!
Queda la posibilidad abierta de rescatar la persona
atreviéndose a descender a los infiernos
y rescatar la poesía: Despertar ¿conseguirá la armonía el ser?
En función del reconocimiento de la instancia sagrada,
fortalezco mi ser ante cualquier tentativa de la esquizofrenia,
pues lo misterioso es que apareciendo repentinamente
el Yo queda fulminado, lo gobierna la incoherencia, ¿inconsciente + desorden de ideas?,
en ese viaje hacia el No-Ser para los demás, es decir estar loco,
quedo operando en un reducto mi Ser que miraba prisionero
lo que ocurría bajo la conducción sin brújula del capitán-Nada de la nave,
quiero decir que aún habiéndome equivocado por la enfermedad,
quedo exonerado de cualquier culpabilidad, ¡no hay timón!,
aunque puedo recordar detalle por detalle lo que ha pasado,
puedo hablar de una distorsión visual que producía ver
rayos de colores dispersos en el ambiente,
así como sobreponer la imagen de una persona sobre otra,
asustándome pero luego ya enfocando en distinguir a la persona correcta,
con lo que puedo hablar de teletransportación o metamorfosis visual
pero conseguí salir de la esquizofrenia y contarlo ahora.
Me sorprende haber dibujado espíritus apareciendo junto a algunas personas,
pero no hubo actividad, toda era producto fantasioso de mi Ser,
una respuesta que me otorgaba lo que desconozco de mi No-Ser.
Con respecto a la actividad visual pude alterar la percepción de la realidad,
aunque luego se sobreponía lo que efectivamente era real.
En el plano auditivo era un caos, todo era suplantado por teorías
que se le ocurrían a mi Inconsciente y al Desorden de Ideas.
Si he bajado a los infiernos, lo es porque caigo en desgracia
después del viaje por la pesadilla esquizofrénica,
tranquilizarme, volver a trabajar, rescatar mis sueños,
como residuo del último round con la esquizofrenia
siempre que duermo tengo sueños, trato de hallarles explicación,
o de saber si mi mente se limpia de cargas que no liberaba
porque ahora soñar ha sido dormir, y esto me espantaba
porque antes acostumbraba dormir sin recordar nada,
la instancia de los sueños se ha fortalecido,
¿qué ocurrirá en el futuro? No lo sé...
LA OSCURIDAD DE DIOS
I said to my soul, be still, and let the dark come upon you
Which shall be the darkness of God. As, in a theatre,
The lights are extinguished, for the scene to be changed
With a hollow rumble of wings, with a movement of darkness on darkness,
And we know that the hills and the trees, the distant panorama
And the bold imposing facade are all being rolled away—
Or as, when an underground train, in the tube, stops too long between stations
And the conversation rises and slowly fades into silence
And you see behind every face the mental emptiness deepen
Leaving only the growing terror of nothing to think about;
Or when, under ether, the mind is conscious but conscious of nothing—
I said to my soul, be still, and wait without hope
For hope would be hope for the wrong thing; wait without love
For love would be love of the wrong thing; there is yet faith
But the faith and the love and the hope are all in the waiting.
Wait without thought, for you are not ready for thought:
So the darkness shall be the light, and the stillness the dancing.
Whisper of running streams, and winter lightning.
The wild thyme unseen and the wild strawberry,
The laughter in the garden, echoed ecstasy
Not lost, but requiring, pointing to the agony
Of death and birth.
“Le dije a mi alma, quédate quieta, y deja que la oscuridad venga a ti
Que será la oscuridad de Dios.”
“Le dije a mi alma, quédate quieta y espera sin esperanza,
Pues la esperanza sería esperanza en lo erróneo; espera sin amor
Pues el amor sería amor por lo erróneo; aún está la fe
Pero la fe y el amor y la esperanza consisten en esperar.
Espera sin pensamiento, pues no estás aún preparada para el pensamiento:
La oscuridad será, así, la luz y la quietud la danza.”
“Dices que repito
Algo que ya he dicho antes. Lo diré otra vez.
¿ Lo diré otra vez?. Para llegar ahí,
Para llegar adonde estás, para salir desde donde no estás,
Deberás ir por un camino en el que no hay éxtasis.
Para llegar a lo que no sabes
Debes ir por un camino que es el camino de la ignorancia.
Para poseer lo que no posees,
Debes ir por el camino de la desposesión.
Para llegar a lo que no eres
Debes pasar por el camino en el que no eres.
Y lo que no sabes, es lo único que sabes
Y lo que es tuyo es lo que no es tuyo
Y dónde estás es donde no estás.”
Which shall be the darkness of God. As, in a theatre,
The lights are extinguished, for the scene to be changed
With a hollow rumble of wings, with a movement of darkness on darkness,
And we know that the hills and the trees, the distant panorama
And the bold imposing facade are all being rolled away—
Or as, when an underground train, in the tube, stops too long between stations
And the conversation rises and slowly fades into silence
And you see behind every face the mental emptiness deepen
Leaving only the growing terror of nothing to think about;
Or when, under ether, the mind is conscious but conscious of nothing—
I said to my soul, be still, and wait without hope
For hope would be hope for the wrong thing; wait without love
For love would be love of the wrong thing; there is yet faith
But the faith and the love and the hope are all in the waiting.
Wait without thought, for you are not ready for thought:
So the darkness shall be the light, and the stillness the dancing.
Whisper of running streams, and winter lightning.
The wild thyme unseen and the wild strawberry,
The laughter in the garden, echoed ecstasy
Not lost, but requiring, pointing to the agony
Of death and birth.
“Le dije a mi alma, quédate quieta, y deja que la oscuridad venga a ti
Que será la oscuridad de Dios.”
“Le dije a mi alma, quédate quieta y espera sin esperanza,
Pues la esperanza sería esperanza en lo erróneo; espera sin amor
Pues el amor sería amor por lo erróneo; aún está la fe
Pero la fe y el amor y la esperanza consisten en esperar.
Espera sin pensamiento, pues no estás aún preparada para el pensamiento:
La oscuridad será, así, la luz y la quietud la danza.”
“Dices que repito
Algo que ya he dicho antes. Lo diré otra vez.
¿ Lo diré otra vez?. Para llegar ahí,
Para llegar adonde estás, para salir desde donde no estás,
Deberás ir por un camino en el que no hay éxtasis.
Para llegar a lo que no sabes
Debes ir por un camino que es el camino de la ignorancia.
Para poseer lo que no posees,
Debes ir por el camino de la desposesión.
Para llegar a lo que no eres
Debes pasar por el camino en el que no eres.
Y lo que no sabes, es lo único que sabes
Y lo que es tuyo es lo que no es tuyo
Y dónde estás es donde no estás.”
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